El Colegio Hermano Felipe Palazón tuvo sus inicios en 1994, cuando la educadora Maritza Navajas, y otros destacados docentes de Tarija, lograron obtener el financiamiento necesario de empresarios locales para materializar los ideales y la inspiración del hombre cuyo nombre honra a nuestro colegio. 

El Hermano Felipe Palazón, oriundo de Zaragoza, España, dedicó su vida al servicio religioso y educativo. En Bolivia, el Hermano Palazón contribuyó a la creación del programa de alfabetización nacional y, en Tarija, transformó el modelo educativo proponiendo una visión de “ciudad educativa”, en la que el colegio debía abrirse y servir a la comunidad más allá de las paredes de la institución.

Años después de su partida, Maritza Navajas, quien había fundado los colegios Eustaquio Méndez y Liceo Tarija, además de luchar por la inclusión de mujeres en el Colegio Antoniano (La Salle), se unió a destacados docentes de Tarija para fundar el Colegio Hermano Felipe Palazón, bajo el lema del Hermano:

«Formaremos una mente que piense, un corazón que ame y una voluntad que obre».